Tropezar Con La Misma Piedra


 

El hombre y sobre todo el político, el gobernante, es el único que tropieza no dos veces, sino que 1001 vez con la misma piedra; me refiero a la falsa creencia de que el poder y la riqueza deben ser precisamente para los ricos y poderosos y que ésta casta de privilegiados es la que debe gobernar; ya sea por derecho, robado, usurpado o adquirido, por decir comprado; nunca por mérito, valor o conocimiento.

Lo peor de todo es que siempre es el Pueblo el que paga las consecuencias de las 1001 desavenencias de los que los gobiernan… Pero el Pueblo también es culpable porque 1001 vez eligen a los mismos gobernantes y con esto ratifican el dominio de su casta sobre sus vasallos.

¿A qué viene todo esto?.. A que hoy día, en pleno siglo XXI y con más de 5000 años de continuos ejemplos a través de la historia de la humanidad, desde los antiguos babilonios y egipcios y con todas las grandes civilizaciones e imperios; nuestros gobernantes y gobiernos, siguen creyendo que apoyar el capital con más capital es la solución para salir de una crisis económica, preludio indiscutible de una rebelión.

Los mal llamados economistas o capitalistas ilustrados y la corriente político-económica-empresarial denominada neoliberalismo, insisten en que inyectar capital a los que manejan el capital, es la solución que se debe aplicar. Pues bien, ya se han inyectado 3 billones de dólares ($3 000000000000) y la crisis lejos de mejorar, empeora.

¿Qué habría pasado si desde un principio se hubiese invertido ese capital o mucho menos, en rescatar al Pueblo que por causa de la avaricia de los ricos y poderosos, cayeron en desgracia?.. Indudablemente habrían salido de su problema, habrían podido pagar a sus acreedores con lo que éstos otra vez tendrían fondos suficientes y no habrían ido a la quiebra económica, se habría evitado la perdida y el remate de las propiedades, los trabadores habrían conservado sus empleos, las empresas no tendrían que cesar a sus trabajadores, etcétera…

Y de haber invertido más el Gobierno en no sólo rescatar a quienes estaban en problemas, sino que, ayudar e incluso beneficiar a quienes aún sin estar en problemas, querían mejorar su situación económica… Esos que no estaban en problemas pero que después si lo estuvieron y perdieron sus empleos; nunca hubieran pasado por esa situación. Es más, la economía y sobre todo la producción se habría reactivado rápidamente, pues son los millones de trabajadores los que mueven la economía y el flujo de capital y no el puñado de ricos y poderosos que lo único que hacen es atesorarlo.