Meritocracia, Tecnocracia y Otras Descracias del Arismo


Meritocracia, Tecnocracia y Otras Descracias del Arismo

Recientes declaraciones han dejado de manifiesto el servilismo dictatorial, cuasi monárquico, de los altos funcionarios gubernamentales hacia la dinastía Arias Sánchez; así como, la total dependencia de poderes y la sumisión casi incondicional de los directores y miembros de los tres poderes: Legislativo, Constitucional y Judicial, hacia el Ejecutivo, al cual responden y obedecen sus mandatos. Y como en toda monarquía, esta sumisión servil y complaciente, se extiende a los altos mandos de los Ministerios y las Instituciones Públicas y Estatales. No es entonces de extrañar que este comportamiento servil esté catalogado como una condición indispensable para poder servir, valga la redundancia, en el Gobierno. Pues, fue el propio monarca, quién lo definió y lo pidió como condición para todos sus subalternos. Mi Gobierno será una Meritocracia… El mérito de poderme servir a Mí, de poder ayudarme a Mí a construir el Estado que Yo quiero, como Yo lo quiero y para lo que Yo quiera… Tampoco es de extrañar que mérito y monarca se parezcan; ya que, en el Arismo son sinónimos.

Mencioné, recientes declaraciones como las de una Ministra de apellido Carvallo en contra de una ex directora del MAC, de apellido Sáenz; por no haber aceptado remover de su sitio una fotografía tamaño natural en la que aparecía la imagen de un ex presidente, tan bien del PLN, que podría opacar la IMAGEN del MONARCA, a quién ella debía lealtad incondicional, como la que se le debe tener a todo monarca dictador y como la que exige la declaración de Meritocracia del Arismo.

Otras manifestaciones no verbales de esta tendencia, bueno algunas sí, han sido, el favoritismo hacia la Familia Real del Arismo. Favoritismo manifiesto en pedir o aceptar la renuncia o separación “voluntaria” de altos allegados a la Familia Real como Ministros y Diplomáticos; pero No Hacer Eso con los miembros de la Familia Real como Sobrinos, Primos o Hermanos; después de todo, los otros, aunque amigos, no pertenecen a la Familia Real… Caso más claro de este favoritismo lo es, el Asunto con los Fondos del BCIE, utilizados para “Consultorias” y otros motivos totalmente ajenos a su destino original… ¿Porqué los Diputados de la Comisión Investigadora están de acuerdo en llamar a declarar al amigo Ministro y No al Hermano de la Familia Real.

En relación directa con este ultimo caso, está la llamada Tecnocracia, otro término definido por el Arismo. La tecnocracia se manifiesta, no en un gobierno con capacidad técnica e intelectual, como sería de esperar, sino en un Gobierno con Técnicas para Manipular, Engañar y Ocultar como lo espera y pone de manifiesto el Arismo. Volviendo al caso, estas Técnicas, ahora descubiertas por la Prensa, tratan de Ocultar los Destinos de Fondos Públicos al Disfrazarlos de Consultorías y así Utilizarlos Para Propósitos Propios e Indebidos, A Conveniencia… Como este hay muchos ejemplos de cómo utiliza la Tecnocracia el Gobierno del Arismo, algunos son conocidos; pero la mayoría no, ya que, en este aspecto, hay que reconocerlo, han sido muy eficientes. Basta decir que, los vínculos políticos de las FARC con el Gobierno, aún no han sido esclarecidos, a pesar de que, es obvio que existen.

Pero la mayor DESCRACIA de todas y la que definitivamente no comprendo porqué el público en general no ve o no entiende sus alcances, es la LIBRECOMERCIOCRACIA. Esta es la única DESCRACIA que no ha sido inventada por el Arismo; pero también la única que el Arismo ha adoptado como un Miembro Más De la Familia Real, y a quién protege, consiente y cuida con esmero, en busca de verla crecer y cosechar sus frutos. Frutos que solo desgracias traerán al común denominador de la ciudadanía y al trabajador asalariado.

Como reflexión final: No sería mejor dedicar toda su lealtad y compromiso a fomentar y aplicar valores éticos en todas sus acciones, en el trabajo y en la vida diaria, en vez de desperdiciarlos en idolatrías hacia un egomaniático y megalómano… Ayudar es mejor que adular y servir es mucho mejor que servirse.